Los investigadores compararon los pacientes que aún tenían los dientes naturales, con los que tenían pocos dientes o no. Los pacientes con dientes naturales no eran mucho más propensos a tener problemas de pérdida de memoria o las primeras etapas de la enfermedad de Alzheimer.
Uno de los factores que pueden contribuir a la enfermedad de Alzheimer es la gingivitis, que se caracteriza por la inflamación y sangrado de las encías, además de causar el mal aliento, pus, reblandecimiento, cambio en la posición de los dientes y, a menudo, incluso la pérdida total de los dientes. “Las enfermedades bucales y las enfermedades sistémicas están estrechamente relacionadas, Entre ellos se encuentran: carrera, Alzheimer dolor, diabetes y enfermedades cardiovasculares”, explica el Dr.. Eduardo Rollo Duarte, dentista periodoncista especialista del sueño.
“La gingivitis es una infección con bacterias producen toxinas que pueden llegar al cerebro a través del torrente sanguíneo causando daño a los tejidos del sistema nervioso central. Otros estudios sugieren que las enfermedades del cerebro que conducen a ciertos tipos de demencia, la enfermedad o incluso la famosa enfermedad de Alzheimer , se pueden iniciar o empeorar por algún agente biológico física, como una infección bacteriana”, según experto
Fuente: Floter & Schauff